Uno de los objetivos más relevantes en los que se están centrando las normativas de economía circular es la trazabilidad de los materiales y productos finales. La trazabilidad aumenta la transparencia y ayuda a las autoridades a controlar todo el ciclo de vida de un producto, lo que anima a los fabricantes y minoristas a adoptar prácticas éticas de producción y comercialización.
Adoptar la trazabilidad en la estrategia de una empresa es uno de los objetivos más desafiantes y rentables para ellas, para cumplir con las normativas de circularidad más recientes o para promover sus prácticas sostenibles. Descubre los 9 mejroes consejos para implementar la trazabilidad en una marca de moda.
Según la legislación de la UE, trazabilidad significa la capacidad de rastrear cualquier producto o material que vaya a ser utilizado para el consumo, a través de todas las etapas de producción, procesamiento y distribución.
Para la industria textil, trazabilidad significa hacer disponible la información sobre cómo se han obtenido, procesado y producido las fibras y materiales a través de la cadena de suministro. El principal objetivo de la trazabilidad es aumentar la transparencia y permitir que las organizaciones tomen decisiones más circulares.
La promoción de la trazabilidad en la etiqueta de un producto tiene múltiples beneficios, tanto para los consumidores como para las empresas. La transparencia mejora la calidad de los procesos, facilitando la identificación de errores o procedimientos incorrectos, e impulsando procedimientos más seguros y eficientes, lo que también reducirá los costes de producción. Esta información sobre producto también incrementará y facilitará el control de los productos por parte de las autoridades, identificando cómo es exactamente un producto, cuál es su impacto medioambiental y la procedencia de sus materiales.
Si una empresa desea aprovechar la trazabilidad, debe verla como una posible ventaja competitiva y definir una correcta estrategia relacionada con la trazabilidad. En el contexto actual, los consumidores están más concienciados y preocupados por sus hábitos de consumo y su huella medioambiental, por lo que es importante proporcionarles este tipo de información.
El primer paso en toda estrategia empresarial es analizar como es la situación inicial. Una auditoría interna o externa para descubrir cómo de transparente es una empresa y sus colaboradores y rastrear sus productos durante todo su ciclo de vida es el punto de partida de futuras nuevas acciones de trazabilidad.
La transparencia siempre está relacionada con las certificaciones. Son una herramienta de comunicación fácil para garantizar la transparencia a los consumidores de una empresa. En la primera audición, sería útil identificar cuáles son las certificaciones más populares relacionadas con sus productos y cómo obtenerlas.
La información es el núcleo de cualquier acción de trazabilidad. Reportar información sobre cada etapa de la cadena de suministro es fundamental, y es importante exigir detalles sobre el origen y cómo un material es gestionado por nuestros proveedores.
Hay muchos socios con los que trabajar para adoptar la circularidad en su empresa. Los evaluadores de sostenibilidad, los proveedores o la gestión de residuos son ejemplos de cómo una marca puede asociarse con otros para aumentar su trazabilidad. Recovo, por ejemplo, puede ayudar a una marca de moda a gestionar sus tejidos sobrantes para reutilizarlos con su software de gestión interna de tejidos CiMS, o la posibilidad de venderlos en su marketplace de tejidos deadstock.
Si la trazabilidad no se comunica a los consumidores de una empresa, no tiene sentido. Etiquetar y comunicar cómo se ha fabricado un producto o de dónde proceden sus materiales marca la diferencia entre marcas, sobre todo si su objetivo es promover la calidad de sus productos finales.
El etiquetado también ayudará a nuestra sociedad a educar a los consumidores. Si un consumidor entiende por qué un determinado producto obtuvo una certificación, éste lo valorará más la cualidades del producto.
Durante los últimos años, las normativas sobre trazabilidad han sido el centro de atención de muchas autoridades. Las últimas normativas europeas como el Digital Product Passport y la Etiqueta Ecológica de la UE definen lo importante que es la trazabilidad para la Comisión Europea, haciendo que sea muy importante para las empresas cumplir con la normativa si quieren operar en el mercado europeo.
La automatización facilita las tareas repetitivas. Asignar tareas repetitivas a un software de automatización va a minimizar riesgos y hacer. Implantar este tipo de sistemas va a favorecer la trazabilidad, que a veces puede ser difícil para algunas empresas.
La tecnología siempre ha sido uno de los mejores aliados para la trazabilidad. Hay muchas formas en las que la tecnología puede aumentar y ayudar a una empresa a aumentar su trazabilidad.Por ejemplo, Recovo lanzó un software CiMS de gestión interna de tejidos que informa automáticamente de cómo se está comportando tu empresa en términos de circularidad.
La trazabilidad debe estar en el centro de cualquier estrategia empresarial, garantizarla aumenta la transparencia de una marca, lo que debe ser prioritario para que genere confianza en sus consumidores. Las autoridades también están en ello: durante los últimos años se han desarrollado varias normativas para aumentar la transparencia y la trazabilidad de los productos, fomentando prácticas de economía circular y reduciendo la huella de la industria textil.
La trazabilidad debe ser el eje de cualquier estrategia empresarial
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